Cómo hacer un Eslogan Publicitario que Atrape

Autor: Inés Diaz

Vamos a tocar un tema que no es exactamente de diseño, pero que te servirá en el caso de que te ocupes personalmente de los textos comerciales de tu negocio, o si contratas un copywriter freelance y quieres supervisar su trabajo.

Este artículo te servirá para saber qué es y cómo hacer un eslogan que se quede grabado en el inconsciente de tu cliente ideal del mismo modo que tú tienes almacenados más de un eslogan que las grandes marcas han sabido incorporar en tu memoria, casi sin que lo notes.

¿Cómo funciona un eslogan?

Quizás te hayas encontrado ante una situación que no esperabas y para expresar tu sorpresa hayas dicho “Para todo lo demás, mastercard”, o en la carretera has pensado la frase: “¿Te gusta conducir?”.

En ningún caso recuerdas si los anuncios que contenían esas pequeñas frases pegadizas vendían un modelo de coche u otro, solo recuerdas que era un BMW. Ni mucho menos sabes lo que te ofrecía Mastercard por contratar sus servicios, pero ya tienes incorporado que hay cosas en tu vida que no tienen precio y que todas las demás se pagan con Mastercard.

Así funciona un eslogan, se clava en la memoria emotiva de tu cliente, y ese es el lugar que más le interesa a tu marca. Click to Tweet

Pero no cualquier frase cumple con los requisitos que un eslogan necesita, así que para aclararnos, comencemos por el principio

Qué es un eslogan publicitario

Un eslogan es el integrante de un equipo, no es solista, no funciona solo.

Veamos un ejemplo, el “Just Do It” de Nike, que ha pasado ya más de tres décadas funcionando. ¿Sabes cuál fue el primer anuncio de la campaña que Nike remataba con su eslogan en 1988?

Era un señor de ochenta años corriendo, sin más. En el anuncio no te dejan ver las zapatillas, ni te hablan del producto, lo que te mostraban era actitud, valor, coraje. Y luego el remate: “Just do it” (Solo hazlo).

Como ves en este ejemplo, el eslogan no es el mensaje de tu campaña, ni la propuesta de valor de tu producto, si no el sello final con el que se sintetiza aquello que quieres que tu cliente asocie a tu marca.

Hacer un eslogan por sí solo no sirve, ya que no tiene alcance para hacer llegar el valor de lo que estás ofreciendo, necesita sí o sí estar apoyado en un contenido visual, que es el logo, una identidad de marca y una campaña.

Es importante no confundir el eslogan con tu propuesta de valor.

Propuesta de valor y eslogan se confunden porque son dos herramientas que necesitan un gran poder de síntesis, pero no son lo mismo, no cumplen la misma función.

La propuesta de valor de tu marca sirve para reducir al máximo qué es lo que ofreces, a quién se lo ofreces, qué es lo que vas a resolver, y si es el caso también el cómo vas a hacerlo.

Una buena propuesta de valor hará de filtro en el comienzo de tu mensaje o argumento de ventas, en cambio el eslogan cierra el mensaje de tu campaña.

El eslogan es tu síntesis, el broche de oro, el remate final, no el inicio.

Cómo hacer un eslogan que atrape

Si quieres crear un eslogan que se quede enganchado a la mente de tu cliente ideal como una etiqueta adhesiva, hay que trabajar la campaña entera.

Apunta en una lista las emociones que quieres que tu público asocie a tu producto o servicio. Si vendes jabones, las emociones de coraje y valor que despierta Nike, no te van a servir, pero sí las relacionadas a sentirse diferente, más limpio, o a la seguridad de evitar peligrosas bacterias, etc. Suelen ser más de una, así que no desistas al primer intento. Busca esas emociones.

Ojo: Investiga tu mercado para no recurrir a la misma emoción que está usando tu competencia

Una vez que tengas esa lista, descansa un poco y olvídate del tema. Al día siguiente, cuando leas el listado sabrás elegir cuál es la más conveniente para asociar a tu marca.

En primer lugar, consigue un logo

¿Ya tienes logo? Si tu marca no tiene un logotipo, hay que comenzar por ahí. Es indispensable.

Tu dirás ¿Y cuando un eslogan suenan en la radio? Es verdad que no llevan un logo, funcionan porque se apoyan en una melodía.

En cualquiera de los dos casos el eslogan va asociado a otra herramienta que la sustenta.

Si tienes la posibilidad de crear un logo y el eslogan de tu marca al mismo tiempo, es una ocasión fantástica para transmitir con claridad esa emoción que quieres asociar a lo que sea que quieras vender o promocionar.

Cómo crear un logo gratis en 7 pasos con Desygner

Ahora sí, a elegir palabras para tu eslogan

Haz frases cortas alrededor de esa emoción, cuanto más cortas mejor, que no superen las 5 palabras. (Hace unos años se apuntaba a frases de ocho palabras, pero todo tiende a ser más corto y más rápido, así que intenta reducir las frases al mínimo).

Para que tú eslogan sea pegajoso busca que sea positivo. En un argumento de ventas puedes hablar de las cosas que tu cliente teme, pero en un eslogan tienes que lograr sí o sí emociones positivas.

  • Que sea fácil de comprender.
  • Que sea atemporal, es decir, no lo asocies a algo pasajero.
  • Intenta que sea de pocas palabras con muchas sílabas o muchas palabras de pocas sílabas.
  • Mejor si hay rima. Eso ayuda a que se quede grabado en la memoria.
  • Importante: que sea fácil de pronunciar.
  • Huye de las abstracciones y busca palabras concretas.
  • Comienza con un verbo de acción. Un imperativo “haz”, ”Vuela”, ”Sueña”, ”Sé”, etc.
  • No utilices frases trilladas que estén demasiado oídas, nada de “tu negocio al siguiente nivel”, ni “deja tu zona de confort”, o cosas así.

Sí piensas vender a otros países ojo con las expresiones que usas. Piensa en KFC (la cadena de pollo frito) que cuando lanzó su “Para chuparse los dedos” no supo calcular que en China eso representaba “Cómete tus propios dedos”.

El Gran Tip Final

Hay un consejo que es muy importante y que puede hacer que tu marca sea recordada.

Lo ideal es que si tu negocio tiene una característica única que la diferencia de la competencia, el eslogan refuerce esa ventaja Click to Tweet

Por ejemplo la clínica dental Crossoak atiende a pacientes con grandes dosis de ansiedad. Su eslogan es “Atendemos a los cobardes” y de refuerzo, en su web se ve un pollo. Vale, esta es una opción demasiado “americana”, pero ya lo vas entendiendo ¿No?

Veamos algunos Ejemplos de Eslogan

  • Kentucky Fried Chicken: Para chuparse los dedos
  • Nokia: Connecting People
  • Adidas: Nada es imposible
  • Nike: Solo hazlo
  • Master Card: Hay cosas que el dinero no puede comprar. Para todo lo demás, MasterCard
  • Red Bull: Red Bull te da alas
  • Nespresso: ¿Qué más?
  • Heineken: Piensa en verde
  • Kit Kat: Tómate un respiro, tómate un Kit Kat
  • Apple: Piensa distinto
  • Ariel: Ariel es blancura
  • Mahou: Un sabor 5 estrellas
  • BMW: ¿Te gusta conducir?
  • SEAT: Autoemoción
  • Sorteo de Navidad: Que la suerte te acompañe
  • L’Oréal: Porque tú lo vales
  • M&M: El chocolate se derrite en tu boca, no en tu mano
  • Tenn: El algodón no engaña
  • Lay’s: ¡A que no puedes comer solo una!
  • McDonald’s: I’m loving’ it (Me encanta)
  • General Electric: “Imagination at Work” (La imaginación en funcionamiento
  • Maybelline: Está en ti. Está en Maybelline.
  • Cuerpo de marines de Estados Unidos: “The Few. The Proud. The Marines.” (Los pocos. Los orgullosos. Los marines.)
  • Coca-Cola: Destapa la felicidad, La Chispa de la Vida
  • Motorola: “¡Hello, Moto!”

¿Cuántos de ellos ya los habías escuchado?

Autor: Inés Diaz
Copywriter

Comments

Deja una respuesta

You have to agree to the comment policy.